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Burnout en publicidad:
cómo no acabar como el cenicero de un bingo
cómo no acabar como el cenicero de un bingo
La publicidad es fascinante… hasta que te convierte en ceniza. Y no en el sentido cool de un phoenix renaciendo de sus propias llamas, sino en el de "¿qué estoy haciendo con mi vida a las 3 a.m. retocando un logo que el cliente va a cambiar igual".
La industria creativa nos vende adrenalina: briefings a las 19:00, clientes que piden "algo viral" con presupuesto de mercadillo, y la promesa eterna de que "esta campaña cambiará tu carrera" (spoiler: no la cambiará, pero sí tu presión arterial). Hasta que un día dejas de sentir. No es que ya no te guste; es que ya no te importa. Y eso, no es "falta de pasión", es burnout, ese regalo envenenado que la OMS define como "el resultado del estrés crónico en el trabajo mal gestionado". Y no, no es un invento de millennials blanditos: es el precio de un sistema que confunde explotación con "cultura del esfuerzo".
Dato que duele: Según RRHH Digital, el 41% de los trabajadores españoles está estresado y el 55% ha sufrido agotamiento laboral. O sea, si no estás quemado, es que aún no has trabajado lo suficiente. Bienvenido al club.Reconocerlo: cuando tu cabeza acumula más cenizas que un after en Ibiza
El burnout no llega como un plot twist de Juego de Tronos, sigilosamente. Como ese jingle de los 90 que se te queda atascado en la cabeza y te hace cuestionar todas tus decisiones vitales. Un día abres el portátil, ves la lista de tareas y piensas: "Ojalá me atropellara un camión de Amazon… pero que no sea ahora, que tengo reunión a las 10".
La ciencia lo avala: Un estudio de la Universidad de Berkeley demuestra que el burnout no es solo cansancio, sino "la brecha entre el esfuerzo y el significado". Traducción: cuando dejas de creer que lo que haces importa, tu cerebro se apaga como un Mac sin batería. Y en España, donde el 55% de los trabajadores ha sufrido agotamiento según datos de RRHH Digital, el problema no es "si lo sientes", sino cuántas veces lo has disimulado con café, memes de publicidad y noches en vela.
🚨 Qué no hacer (o cómo acelerar tu autodestrucción):
"Mañana lo arreglo" es la mentira que te cuentas desde 2019.
Aislarte como un lobo solitario (spoiler: los lobos no tienen burnout, pero tú sí).
Creer que dos semanas de vacaciones borrarán meses de explotación. El País lo confirma: no es así.
Negociar: aprender a decir NO con finesse
Decir "no" no es rebeldía; es supervivencia. Y no, no hace falta que te pongas agresivo. La clave está en la fórmula "No, pero…", que es como un airbag para tu dignidad.
Por ejemplo, imagina que el cliente te dice "Necesito 3 opciones para ayer". Tu respuesta debería ir en esta dirección: "No puedo entregarte tres opciones con calidad en ese plazo, pero sí priorizar una opción brillante ahora y pulir las demás después. ¿Qué prefieres: velocidad o calidad?".
Y ojo: hay lógica detrás. Un estudio publicado en Fast Company indica que responder emails fuera de horario laboral está directamente ligado a mayor burnout y productividad cero. Y para muestra, un botón: la CEO de McCann Detroit nos pidió no enviar emails después de las 18:00 ni organizar reuniones los viernes por la tarde a partir de las 13:00 para respetar el derecho a la desconexión de todos los empleados. ¿Resultado? Pues no todo el mundo lo puso en práctica, pero al menos nos dio una excusa a los demás para ignorar esos emails ¿Cómo te quedas?.
🚨 Qué no hacer (o cómo convertirte en el becario eterno del estrés):
Decir "no" sin alternativa (parecerás un rebelde sin causa, y eso no paga facturas).
No preguntar y guardarte los "síes" contradictorios en la cabeza (documenta todo).
Enfrentarte solo al problema (busca un aliado: Traffic, CD, o hasta el de RRHH que parece inofensivo).

Buscar oxígeno: tu creatividad no es solo tu empleo
Cuando tu identidad profesional se fusiona con tu vida, te conviertes en un incendio con patas. La resiliencia no es aguantar; es recargarte. Y no, no hablo de "encontrar tu pasión" (que suena a coaching barato), sino de ponerte límites como si fueran deadlines sagrados.
La psicología positiva lo celebra: cultivar intereses ajenos al trabajo no es solo “hobby”, es estrategia. Y en algunos países de Europa, como Francia, las leyes del “derecho a desconectar” obligan a las empresas a respetar los tiempos de descanso.
🚨 Qué no hacer (o cómo fingir que descansas):
Confiar en que "dos semanas de vacaciones" lo arreglan todo (spoiler: no).
Cambiar un trabajo tóxico por otro freelance con los mismos vicios (solo que ahora sin seguro médico).
Ignorar los micro-descansos (5 minutos sin pantalla = 1 hora menos de burnout al día).
Reinventarse: cómo cambiar de rumbo sin ahogarte en el intento
Cuando el burnout te corrige sin permiso, mover ficha no es traición; es sentido común. Pero ojo: Saltar sin red es como tirarte de un avión con un paracaídas de IKEA. Es preferible empezar a construir antes que huir: ahorra, traza tu red, explora tus habilidades y prepárate para buscar una nueva oportunidad laboral.
Hay muchos casos reales que prueban que hay vida más allá de la agencia... Creativos que dejaron agencias top para montar estudios boutique. Sí, menos glamour, pero más calidad de vida. O profesionales que ahora dan clases o hacen consultoría, y duermen ocho horas. La clave no es ser freelance, sino tener el lujo de elegir qué proyectos aceptas y cuáles mandas a la mierda.
🚨 Qué no hacer (o cómo repetir los mismos errores con distinto logo):
Lanzarte sin colchón económico. Sin ahorros, eres rehén del primer cliente que aparezca.
Reproducir los mismos patrones tóxicos en tu nuevo trabajo. "Ahora soy mi propio jefe" no significa "ahora me exploto yo solo".
Usar la reinvención como excusa para esconderte. Si huyes sin rumbo, acabarás en el mismo sitio, pero con más deudas.

No importa cuánto te empeñes en ignorar el burnout, al final te pasará factura. La buena noticia es que tú tienes el poder. Aunque no lo parezca.
Hoy mismo puedes empezar a dar pequeños pasos hacia una vida mejor: rechaza una tarea,aunque sea pequeña; bloquea 1 hora al día para algo que no sea trabajo, como ver El Juego del Calamar sin buscar insights; o pega un post-it en tu pantalla que te recuerde: "NO SOY UN CENICERO".
Porque al final, las agencias no recuerdan quién trabajó más horas… pero tu cuerpo, sí.
Quiero más
Nadie sale del burnout con frases de Mr. Wonderful. Hace falta método, recursos y, sobre todo, saber qué funciona más allá del “ponte meditar y ya”. Aquí van libros, herramientas y estudios que puedes consultar para tomar control de tu tiempo, tus tareas y tu ansiedad.




📚 Libros que te cambian el chip (y no son autoayuda barata)
Slow Productivity (Cal Newport.2024)
Por qué: porque en publicidad, el "más rápido, más fuerte" es un billete directo al infierno. Newport te enseña a trabajar en menos cosas, pero con más impacto. Ideal para dejar de medir tu autoestima en número de deliverables o likes de cliente. Frase para llevar: "La productividad no es hacer más, es hacer que lo que hagas importe."
Por qué: porque en publicidad, el "más rápido, más fuerte" es un billete directo al infierno. Newport te enseña a trabajar en menos cosas, pero con más impacto. Ideal para dejar de medir tu autoestima en número de deliverables o likes de cliente. Frase para llevar: "La productividad no es hacer más, es hacer que lo que hagas importe."
Cuatro mil semanas (Oliver Burkeman. 2021)
Por qué: un reality check brutal: tienes unas 4.000 semanas de vida. ¿De verdad quieres pasarlas respondiendo correos a las 3 AM o revisando briefs mal escritos? Burkeman te ayuda a priorizar sin culpa.
Por qué: un reality check brutal: tienes unas 4.000 semanas de vida. ¿De verdad quieres pasarlas respondiendo correos a las 3 AM o revisando briefs mal escritos? Burkeman te ayuda a priorizar sin culpa.
Getting Things Done (David Allen .2001)
Por qué: el clásico que nunca falla. Si tu cabeza es un moodboard de tareas sin orden, este libro es tu reset. Aprende a vaciar la mente y organizar ideas sin sentir que trabajas en una trituradora de papel.
Por qué: el clásico que nunca falla. Si tu cabeza es un moodboard de tareas sin orden, este libro es tu reset. Aprende a vaciar la mente y organizar ideas sin sentir que trabajas en una trituradora de papel.
First Things First (Stephen Covey et al. 1994)
Por qué: porque en publicidad, lo "urgente" suele ser lo que grita más fuerte, no lo importante. Covey te enseña a decir "no" sin remordimientos y a priorizar lo que realmente suma.
Por qué: porque en publicidad, lo "urgente" suele ser lo que grita más fuerte, no lo importante. Covey te enseña a decir "no" sin remordimientos y a priorizar lo que realmente suma.
🔧 Métodos y herramientas para no reventar (y seguir siendo útil)
Matriz de Eisenhower
Qué es: una tabla para separar lo importante de lo urgente. Ideal para evitar decir "sí" a todo y acabar como un zombie en la oficina.
Cómo usarla: Divide tus tareas en 4 cuadrantes: Hacer ya, Programar, Delegar y Eliminar. Spoiler, el 80% de los briefs de última hora van al último cuadrante.
Ejemplo: "¿Reunión a las 7 PM para revisar un copy que el cliente no ha aprobado? Eliminar (o delegar a quien cobra menos que tú)."
Qué es: una tabla para separar lo importante de lo urgente. Ideal para evitar decir "sí" a todo y acabar como un zombie en la oficina.
Cómo usarla: Divide tus tareas en 4 cuadrantes: Hacer ya, Programar, Delegar y Eliminar. Spoiler, el 80% de los briefs de última hora van al último cuadrante.
Ejemplo: "¿Reunión a las 7 PM para revisar un copy que el cliente no ha aprobado? Eliminar (o delegar a quien cobra menos que tú)."
Mood trackers / Diarios emocionales
Qué son: apps como MoodFit, Daylio o WorryWatch que te ayudan a detectar patrones de ansiedad o estrés. Si ves que cada vez que trabajas con 'Cliente X' acabas comiendo churros a las 4 am, es señal de que algo va mal.
Qué son: apps como MoodFit, Daylio o WorryWatch que te ayudan a detectar patrones de ansiedad o estrés. Si ves que cada vez que trabajas con 'Cliente X' acabas comiendo churros a las 4 am, es señal de que algo va mal.
Bloques de trabajo profundo + Técnica Pomodoro
Qué es: trabajar en tareas creativas sin interrupciones por períodos de 25-50 minutos, seguidos de descansos cortos. Ideal para evitar el desgaste y mejorar la concentración. Cómo aplicarlo en publicidad: usa los Pomodoros para tareas que requieren flow (ej: escribir copys, idear campañas). Los descansos son para estirar las piernas, no para revisar el correo. Si rompes la regla, haz 10 flexiones (o come un churro de castigo).
Qué es: trabajar en tareas creativas sin interrupciones por períodos de 25-50 minutos, seguidos de descansos cortos. Ideal para evitar el desgaste y mejorar la concentración. Cómo aplicarlo en publicidad: usa los Pomodoros para tareas que requieren flow (ej: escribir copys, idear campañas). Los descansos son para estirar las piernas, no para revisar el correo. Si rompes la regla, haz 10 flexiones (o come un churro de castigo).
Reglas de descanso obligatorio
Qué son: Límites no negociables. Por ejemplo, bloquear horarios sin correo (ej: de 1 pm a 2 pm = hora sagrada para comer sin hablar de trabajo). No trabajar fines de semana salvo emergencia real (y no, que el cliente quiera un cambio de font no es una emergencia). Usar el modo "No molestar" en el móvil después de las 8 pm. Si el jefe se enfada, dile que es tu "horario de creatividad nocturna" (mentira piadosa)
Qué son: Límites no negociables. Por ejemplo, bloquear horarios sin correo (ej: de 1 pm a 2 pm = hora sagrada para comer sin hablar de trabajo). No trabajar fines de semana salvo emergencia real (y no, que el cliente quiera un cambio de font no es una emergencia). Usar el modo "No molestar" en el móvil después de las 8 pm. Si el jefe se enfada, dile que es tu "horario de creatividad nocturna" (mentira piadosa)
🎯 ¿Y ahora qué?
Si crees que el burnout es solo "cansancio" y no el síntoma de un sistema podrido, este artículo es tu primer paso para dejar de normalizarlo. Porque el problema no es que estés agotado: es que alguien se beneficia de que lo estés.
Y si no te apetece leer… también puedes escuchar el Episodio sobre burnout en El Sí Invisible, donde hablo de por qué en publicidad confundimos "trabajar hasta reventar" con "ser bueno en esto" (spoiler: no lo es). 🎧 Escúchalo aquí.
O, si prefieres hablar de esto en persona (o por pantalla), conéctate conmigo en LinkedIn @RobertoPlatas o escríbeme a elsiinvisible@gmail.com. Cuéntame tu historia de burnout. No estás solo, aunque el open space de tu oficina te haga sentirlo. Porque al final el burnout es solo un bad moment… Y un café, una charla o un episodio de El Sí Invisible pueden ser el primer paso para salir de él.